Treinta
años, ¡qué casualidad más hermosa y a la vez tan placentera, haber
nacido el mismo año en que se creó la radio de verdad en Conil.
La radio libre, independiente y, por supuesto, más participativa que
nunca, donde los 5 magníficos entiéndase por sus creadores, no quisieron
hacer de ella un negocio, sino un espacio abierto y participativo,
movidos por las inquietudes de un país que comenzaba a despertarse, tras
haber sido sometido a un letargo de crecimiento, provocado por una
dictadura.
Sin desviarme del tema, quiero agradecer a estas cinco personas:
Antonio Marquez Moreno, Juan García , Jose Antonio Ureba,
Juan Sanchez Alba
y Manolo Lobón la creación de este medio, en el cual he estado
colaborando durante diferentes etapas de mi vida. La narración de las
andanzas del equipo de nuestro pueblo: el Conil C.F., quizás de ahí
venga mi mayor pasión sabida por todos los que me conocen, que no es
otra que la información, el micrófono y las ondas.
Haciendo un
ejercicio de memoria, he de remontarme al otoño de 2001, la fecha más
traumática de mi vida, recuerdo estar un domingo más como cualquier niño
de 13 años, que pierde su tesoro más preciado (su padre), ausente,
triste, preguntándose mil porqués con respuestas vacías.
En ese
momento llaman a la puerta de mi casa y a la vez creo que a la de mi
corazón, era un amigo de mi padre, que también era el director además de
unos fundadores de la radio de mi pueblo. Una vez terminada la
pertinente visita, me ofreció ir con él, al partido que disputaba el
Chiclana con nuestro Conil.
En mitad del encuentro, el profesional,
que por aquel momento narraba para el mencionado medio, era Paco Aroca y
me cedió el micrófono, para que yo hiciera un ligero comentario de 1
minuto. 1 minuto, el cual se alargaría una vida.
A raíz de este día, poco a poco, fui entrando en este mundo.
A los pocos meses, se presentó la vacante, aquel niño que hacía algún
que otro comentario, se convirtió en el narrador y en la información del
equipo de su pueblo.
Al año siguiente, me invitaron a participar
en uno de los días más especiales y emblemáticos de la radio en Conil.
La campaña de Cáritas, que como todos los conileños saben se lleva a
cabo a través de la radio. Recuerdo llegar al Colorado una mañana de
sábado, tras haber sido invitado a colaborar y a pasar el día con dos
amigos Juan Gacia "Campanero" y José Antonio Ureba "Zurdo". Al segundo
como siempre se le ocurre una genialidad y es que cada vez que se
consiguiera sumar un millón de pesetas lo podríamos cantar como un gol. Y
así fue, me recuerdo en aquel salón con aquellos dos fenómenos
celebrando, como si de un gol del Conil se tratase, y cantando
"Goooooool de la solidaridad del pueblo de Conil". Hoy todavía cuando
escucho que se mantiene esa frase para conmemorar la consecución de un
millón, me llena todavía de emoción y me produce un orgullo inmenso.
El otro momento épico que recuerdo es el homenaje realizado por mi
persona al mayor seguidor que tenía el Conil C.F. Un hombre justo
solidario, que supo integrarse en el pueblo y ser querido por todos, a
través de sus actos y superando las propias barreras que la naturaleza
puso en él. Recuerdo aquella anécdota más significativa para mí, en que
“Francisco Higuito”, como era conocido en nuestro pueblo o “la abuela”
como era nombrado por mi padre o por mí, siempre con el mayor respeto
que este se ganó a pulso, cuando en el campo, donde el pasaba sus ratos
libres cuidando de sus animalitos, un día se colaron unos inmigrantes
sin papeles, y él les llevó comida y les dio cobijo mientras pudo. Un
desgraciado día ocurrió un fatal acontecimiento, fue atropellado por una
furgoneta que le costó la vida. No se sabe cómo, lo cierto es que
recibió un ramo de crisantemos como gesto de agradecimiento por parte de
aquellos sin papeles, como se le ha denominado, que ya eran legales,
porque tenían sus papeles en reglas.
La última frase que recuerdo
de aquel homenaje pronunciada por mí hace 16 años fue: "Tú, que nos
enseñaste, a tu corto entender, que no importan las situaciones, sino la
personas”
Todo esto que he contado aquí, es el recuerdo más grato
que me llevo de haber participado en esta santa casa: Radio Juventud de
Conil, en el 107.1 de la FM.
Carlos Ramirez Moreno